Las Google Glass aun no están a la venta pero ya cuentan con varios prohibiciones de su uso en muchos establecimientos en diferentes países. Así, por ejemplo, prohíben su uso en el casino Caesers Palace en Las Vegas ante el temor de poder hacer trampas en la zona de juego. Además las gafas de Google ya están prohibidas en un bar de Siettle porque podría violar la intimidad de los usuarios del local. Y por supuesto a los cines y teatros es mejor ni intentar entrar con las Google Glass puestas porque así el problema de la violación de derechos de autor crecería de forma espectacular.
Pero no es todo. Ahora en muchos países están estudiando posibilidad de prohibir la conducción con las Google Glass. Las razones son evidentes: si no se puede conducir un coche mientras manejas un teléfono móvil es lógico que tampoco se pueda hacer lo mismo con esas gafas.
En el Departamento de Transporte del Reino Unido ya tienen preparado un proyecto de la normativa que prohibirá el uso del dicho gadget. De hecho podría ser así que en este país no necesitarían ni aprobar la normativa nueva, acogiendo la prohibición a la normativa ya existente. Al igual que en España y en la mayoría de los países de la Unión Europea, en el Reino Unido también existe término de la conducción temeraria, lo que incluye cualquier práctica que pone en peligro la seguridad vial.
En fin, a Google Glass le crecen los enanos. A este paso el gigante de Internet simplemente decidirá sacar este aparato en edición muy limitada para unos pocos frikis. Total, no se podrá ir con esas gafas a ninguna parte…