Un fan del universo Tolkien se ha atrevido a hacer lo que Peter Jackson, cegado por el oro de la taquilla, no se atrevio a hacer: dejar el libro de El Hobbit en una sola película. Eso sí, se trata de una megapelícula de casi de cuatro horas y media.
El autor de esta obra se hace llamar ‘Tolkien Editor’ y ha lanzado El Hobbit: El montaje de Tolkien, que recorta en la mitad las más de ocho horas de películas con las que Peter Jackson había estirado hasta más no poder el chicle de la precuela de El Señor de los Anillos.
El montaje tiene un metraje de cuatro horas y 21 minutos de duración y su autor explica en su blog las razones que le llevaron a ponerse manos a la obra y realizar la ardua tarea de sintetizar la verborrea cinematográfica de Peter Jackson.
El autor especifica y justifica los cortes y los descartes que realizado para dejar la trilogía en una única película:
– La trama de Dol Guldor ha sido completamente eliminada, incluyendo las apariciones de Radagast, Saruman y Galadriel. Este fue, explica el autor, el corte más obvio y el más fácil de llevar a cabo ya que es irrelevante para la trama principal. En este montaje, al igual que la novela, Gandalf desaparece abruptamente en las fronteras del Bosque Negro, y luego vuelve a aparecer en el sitio de la Montaña Solitaria, para avisar que se aproxima un ejército orco.
– El triángulo amoroso entre Tauriel Legolas y el enano Kili. Esta peculiar y forzada historia de amor entre la elfa y el enano también se ha eliminado. De hecho, Tauriel no aparece en la película y Legolas sólo cuenta con un breve cameo durante el arresto de los enanos en El Bosque Negro.
– La trama sobre los orcos. Azog, obviamente, sigue liderando el ataque a la Montaña Solitaria en el final, pero no aparece en la película hasta después que la compañía se escapa de los túneles de los trasgos (lo que sugiere que la muerte del Gran Trasgo es un factor en su venganza, ya que era en la novela).
– Las escenas de Esgaroth, La Ciudad del Lago. Muchas de estas secuencias han sido recortadas como el encarcelamiento de Bardo y el accesorio ataque de los ocros a su casa.
– El prólogo con el viejo Bilbo. Al igual que en la novela, el autor del nuevo montaje cree que la película funciona mejor si arranca directamente en el pequeño agujero de Bilbo, con él joven, y ver como se va haciendo más grande e importante a medida que va viviendo aventuras. Además, destaca, es mucho más elegante conocer Smaug desde inolvidable balada de los enanos, en lugar de a través de una grandilocuente secuencia de CGI grandilocuente.
– Varias de las escaramuzas con orcos. La Batalla de los Cinco Ejércitos proporciona más que suficiente guerra con los orcos, así que trufar todo lo anterior de batatallas y batallas con los orcos daría sensación de monotonía y saturación de cara al gran final. Hay cortes significativos tanto en los primeros enfrentamientos como también al final de la primera película, cuando Biblo, Thorin, Gandalf y la tropa de enanos son salvados por las águilas.