Dar el primer paso para comenzar el entrenamiento es realmente muy difícil. Sobre todo para aquellos que no lo ha hecho nunca antes y no tiene idea de lo que le espera y con qué empezar. Pero si tú ya has decidido que hay que hacer algo pero ni pesas, ni spinning, ni running no te atraen entonces CrossFit podría ser una buena opción.
CrossFit son unas series de ejercicios de alta intensidad y de corta duración. Los propios ejercicios no son nada de otro mundo ya que todos ellos han sido cogidos de otros tipos de entrenamientos: halterofilia, atletismo y fitness. ¿Suena a algo facilito? Pero no lo es.
El objetivo principal es desarrollar las habilidades como resistencia cardio-respiratoria, resistencia muscular, fuerza, flexibilidad, potencia, velocidad, coordinación, agilidad, equilibrio y precisión.
Un ejemplo: 10 sentadillas con barra de discos + 10 arranques con pesas rusas + 10 burpee (flexiones con consiguiente salto con brazos levantados encima de la cabeza) + correr con máxima aceleración. ¿A qué ahora ya no te parece todo tan fácil?
La duración del entrenamiento es realmente muy corta comparada con otros tipos de ejercicio. Y la razón es que CrossFit es muy intensivo y tonifica los músculos en un tiempo récord. Su ventaja principal es que es un entrenamiento universal y vale tanto para perder peso como para aumentar masa muscular o para entrenar potencia y resistencia.